El blog de Ediciones Journal

12 de abril de 2016

Marcapasos sin cables: ¿el futuro?



Hasta ahora la práctica habitual para la colocación de marcapasos siempre consistió en la colocación del generador de impulsos eléctricos en una especie de "bolsillo" creado quirúrgicamente debajo de la clavícula con un cateter que se dirige a la cavidad derecha del corazón para estabilizar los latidos lentos.
Por más que esta tecnología se ha mostrado eficaz, también se han presentado algunos casos donde los pacientes han sufrido hematomas y coágulos por los sitios donde pasan los cables.
Es por esto que en los últimos tiempos han aparecido algunos nuevos marcapasos sin cables que se introducen a través de la vena femoral hasta el ventrículo derecho del corazón.
Estos marcapasos inalámbricos pesan 2 gr y tienen un tamaño de 25 a 40 mm de tamaño y cumplen las funciones de un marcapasos con cable.
A pesar de que ya se han instalado más de mil de estos dispositivos, todavía no hay estudios a largo plazo acerca de posibles consecuencias como el riesgo de trombosis o la posibilidad de que el marcapasos inalámbrico se quede sin batería.
A pesar de esto, el modelo inalámbrico ha sido aprobado por la FDA de los Estados Unidos y su uso se está extendiendo.