Por más que esta tecnología se ha mostrado eficaz, también se han presentado algunos casos donde los pacientes han sufrido hematomas y coágulos por los sitios donde pasan los cables.
Es por esto que en los últimos tiempos han aparecido algunos nuevos marcapasos sin cables que se introducen a través de la vena femoral hasta el ventrículo derecho del corazón.
Estos marcapasos inalámbricos pesan 2 gr y tienen un tamaño de 25 a 40 mm de tamaño y cumplen las funciones de un marcapasos con cable.
A pesar de que ya se han instalado más de mil de estos dispositivos, todavía no hay estudios a largo plazo acerca de posibles consecuencias como el riesgo de trombosis o la posibilidad de que el marcapasos inalámbrico se quede sin batería.
A pesar de esto, el modelo inalámbrico ha sido aprobado por la FDA de los Estados Unidos y su uso se está extendiendo.